El día de ayer el Presidente de los EE.UU. Joe Biden y los demócratas del Congreso, dieron a conocer una reforma migratoria que ofrece un trayecto de ocho años para que los casi 11 millones de personas sin estatus legal, que viven en Estados Unidos, obtengan la ciudadanía.
Lo anterior es una muestra de los temas relevantes que, durante el primer día comentó el mandatario respecto a la reforma migratoria, aumentar la cantidad de visas y fondos para procesar solicitudes de asilo, así como el uso de tecnología nueva en la frontera con nuestro país.
La demócrata por California, Linda Sánchez, es la que está patrocinando este proyecto de ley en la Cámara de Representantes y por Robert Menéndez en el Senado. Comentó el Senador Menéndez, “Tenemos una oportunidad histórica para finalmente promulgar una reforma migratoria audaz que no deje a nadie atrás, aborde las causas fundamentales de la migración y proteja la seguridad nacional de nuestro país. Tenemos el imperativo moral y económico de hacer esto de una vez por todas “.
La hoy llamada ‘Ley de Ciudadanía de los Estados Unidos del 2021’, en comparación con propuestas de ley de otros años, ofrece vías más ágiles para obtener la ciudadanía.
A través de una conferencia virtual, el Senador Menéndez comentó, “Estamos aquí hoy porque en noviembre pasado, 80 millones de estadounidenses votaron en contra de Donald Trump y en contra de todo lo que él defendió. Votaron para restaurar el sentido común, la compasión y la competencia en nuestro gobierno, y parte de ese mandato es arreglar nuestro sistema de inmigración”.
Una de las ventajas que tiene este proyecto de ley es que proporcionaría de forma inmediata tarjetas de residencia permanente para inmigrantes (“green cards”) a los jornaleros agrícolas, beneficiarios del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, Deferred Action for Childhood Arrivals), así como el estatus de protección temporal – TPS (Temporary Protected Status) por sus siglas en Inglés – a partir del 1° de Enero del 2017.
Por otro lado, aquellas personas que han estado viviendo en los EE.UU. hasta el 1° de Enero del 2021 el plan marca un tiempo de ocho años hacia la ciudadanía, el cual inicia con un período de cinco años para la posibilidad de obtener un estatus legal temporal, esto será si pasan verificaciones de antecedentes, pagan impuestos y cumplen con otros requisitos básicos. Podrán entonces obtener la ciudadanía después de tres años más.
Igualmente, incluye un plan de cumplimiento que comprende el despliegue de tecnología para patrullar la frontera, tema que ha sido utilizado por los republicanos para ganar adeptos al momento de hablar sobre inmigración.
Además, exige destinar $4,000 millones durante cuatro años “para enfrentar la corrupción, mejorar la seguridad y fomentar la prosperidad en las comunidades de migrantes”.
Biden a estado deshaciendo diversas políticas relacionadas a inmigración sobre la dura línea del ex Presidente Donald Trump, entre las que sobresale detener la construcción del muro fronterizo entre Estados Unidos y México; así como la reunificación de niños separados de sus padres o tutores bajo la política «tolerancia cero», por medio de un grupo de trabajo para hacer esto posible.
Señaló Menéndez, “Como hijo de inmigrantes cubanos que huyeron de un régimen opresivo en busca de una vida mejor en Estados Unidos, he dedicado gran parte de mi carrera en el Congreso, tanto en la Cámara como en el Senado, a luchar por la dignidad de las familias inmigrantes en Nueva Jersey y en todo Estados Unidos. Los inmigrantes contribuyen enormemente a nuestro país y nuestra sociedad; son dueños de negocios, pagan impuestos y enseñan a nuestros hijos, son nuestros compañeros de trabajo, vecinos y amigos”.
Destacó la representante Sánchez, “Soy hija de padres inmigrantes de México, esto es personal para mí. He dedicado mi carrera a construir un sistema de inmigración que permita a las personas vivir sin miedo y un sistema que les brinde a los inmigrantes, como mis padres, que buscan una vida mejor y contribuyen a nuestra nación una oportunidad justa para prosperar”.
El congresista Darren Soto, líder del Caucus Hispano del Congreso, aplaudió la introducción de la Ley de Ciudadanía y lo catalogó como “un nuevo día para los latinos y las comunidades de inmigrantes en todo Estados Unidos”. Aseguró que este “es sólo el comienzo” y dijo que continuará la lucha para promover “una visión audaz para una reforma migratoria integral”. El congresista de Florida añadió “después de cuatro años de la implacable agenda de odio y xenofobia del presidente Trump contra los inmigrantes, ahora podemos estar seguros de que tendremos un sistema de inmigración centrado en la humanidad, la unidad y las oportunidades”.
