El Diario de Juárez, publicó que, de acuerdo a un informe del Reino Unido, un británico obsesionado con el ejercicio hizo que su hija firmara un «contrato» de por vida en el que prometía no engordar nunca, no conforme con esto la pesaba casi a diario mientras controlaba a su familia con mano dura.

El padre, Rachid Khadla de 56 años, enfrenta cargos de crueldad infantil y agresión por su el trato dado a su hija, Amira ahora es adulta.

En el acuerdo con fecha del 2012, la hija de Khadla escribió: “Yo, Amira Khadla, nunca me permitiré engordar. Haré mucho ejercicio para asegurarme de que nunca engordaré, incluso hasta que muera», con base a lo mencionado por el tribunal.

Supuestamente el padre de Amira también la agredió, golpeándola regularmente con una cuchara, golpeándola en el pecho e y en una ocasión le arrojó una silla, igualmente él era quien decidía qué podía usar y ver en televisión.

Residían en Windsor, a las afueras de Londres, se comenta que siempre etuvo obsesionado con el peso de sus hijos y los pesaba continuamente para asegurar que no subieran de peso.

Sarah, la esposa de Khadla durante 27 años, nunca intervino en el abuso, pero declaró únicamente que tenía un «temperamento fuerte», palabras que contribuyeron para el proceso de éste. Su esposo enfrenta tres cargos dos son por agresión que causaron daños corporales y uno por crueldad infantil.